Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva

Hábito 5: Busca primero comprender y luego ser comprendido

La comunicación es la habilidad más importante en la vida. Pasa años aprendiendo a leer, escribir y hablar. ¿Pero qué hay de la escucha? ¿Qué formación ha recibido que te permita escuchar para comprender realmente y en profundidad a otro ser humano? Probablemente ninguno, ¿verdad?

Si es como la mayoría de la gente, probablemente lo primero que busca es que le entiendan; quiere que se entienda su punto de vista. Al hacerlo, puede ignorar por completo a la otra persona, fingir que está escuchando, oír selectivamente sólo ciertas partes de la conversación o centrarse atentamente sólo en las palabras que se dicen, pero perderse por completo el significado. Entonces, ¿por qué ocurre esto?

Porque la mayoría de la gente escucha con la intención de responder, no de entender. Se escucha a sí mismo mientras prepara en su mente lo que va a decir, las preguntas que va a hacer, etc. Filtra todo lo que oye a través de sus experiencias vitales, de su marco de referencia. Coteja lo que oyes con tu autobiografía y ve cómo se mide. En consecuencia, usted decide prematuramente lo que la otra persona quiere decir antes de que termine de comunicarse.

Procurar primero comprender implica un cambio profundo de paradigma. Normalmente, buscamos primero que nos comprendan. La mayoría de las personas no escuchan con la intención de comprender, sino con la intención de responder. Están hablando o preparándose para hablar.

Escuchar con empatía es escuchar con la intención de comprender. Escuchar con empatía se adentra en el marco de referencia de la otra persona. Miras a través de él, ves el mundo como él o ella lo ve, entiendes su paradigma, entiendes cómo se siente.

Este es el hábito que sustenta la necesidad de comprender con empatía al otro para después ser comprendido y poder edificar relaciones interpersonales más constructivas.

Destaca muy especialmente en este hábito la importancia de la escucha empática en el proceso de la comunicación humana. Si bien todos los hábitos de la efectividad se encuentran muy relacionados con la inteligencia emocional, este hábito lo está en un grado mayor por sus propias connotaciones emocionales.

La escucha empática es poderosa porque te brinda datos precisos con los que trabajar. Lleva tiempo, pero ni de lejos el tiempo que lleva corregir los malentendidos cuando ya has recorrido un largo camino.

A medida que aprenda a escuchar atentamente a otras personas, descubrirá enormes diferencias en la percepción. También comenzará a apreciar el impacto que pueden tener estas diferencias cuando las personas intentan trabajar juntas en situaciones interdependientes.

Entonces busca ser comprendido

Procure primero comprender… y luego ser comprendido. Saber cómo ser comprendido es la segunda mitad del hábito 5 y es igualmente fundamental para alcanzar soluciones en las que todos ganan. Procurar comprender requiere reflexión; procurar ser comprendido requiere coraje. Para lograr una solución en la que todos ganan se necesita un alto grado de ambas cosas. Por eso, en situaciones interdependientes, resulta importante que nos comprendan.

El hábito 5 es poderoso porque se encuentra justo en el medio de tu círculo de influencia. Siempre puedes intentar primero comprender. Eso es algo que está bajo tu control. Y a medida que lo haces, tu círculo de influencia comienza a expandirse. El hábito 5 también es algo que puedes practicar ahora mismo.

Seleccione una relación en la que sienta que la cuenta bancaria emocional (una metáfora de la confianza) está en números rojos. Trate de comprender y escribir la situación desde el punto de vista de la otra persona. En su próxima interacción, escuche para comprender, comparando lo que está escuchando con lo que escribió. ¿Qué tan válidas fueron sus suposiciones? ¿Realmente entendió la perspectiva de esa persona?

Stephen R. Covey