¿Qué es Escuchar?

No sabemos escuchar, no sabemos mirar y por esto no sabemos vivir. No sabemos porque no paramos. Escuchar es acoger lo que el otro dice sin cargarlo intelectual ni emocionalmente. Sin meter lo propio.

Las 5 convicciones sobre la escucha:

  1. No podemos dar lo que no se tiene. No podemos escuchar a los demás si no estamos entrenados a escucharnos a nosotros mismos. ¿Cuál es el entrenamiento?, la meditación, la contemplación. Es una práctica enormemente transformadora. Nada hay que transforme más a una persona. Si no hay Silencio no hay comunicación.No hay una escuela más radical para el autoconocimiento que la meditación. ¿Y porqué es importante conocerse? Porque si uno no se conoce no podemos amar, porque uno no puede dar aquello que no sabe que tiene. Y si uno no sabe amar no sabe de que va la vida porque básicamente la vida va de amar y ser amado.
  2. La clave es la rectitud de intención. Tu escucha tiene que ser gratuita, si ningún interés detrás.
  3. El mejor servicio que podemos prestar al otro es ayudarle a creer en si mismo. Estamos llenos de miedos, complejos, traumas … No podemos ayudar al otro a creer en si mismo si nosotros no creemos en él. ¿ Y cómo podemos ayudar al otro a creer en sí mismo? Cree tú en ti, porque si tú crees en ti irradias esa fe porque sencillamente todos testimoniamos lo que somos. Practica el Silencio para llegar a tu fondo y creer en ti mismo. Si conoces tu fondo conoces el fondo del otro porque en el fondo todos nos encontramos. No se trata de sacar al otro del agujero sino ayudarle a creer que se puede o incluso a que no hay agujero. Que hemos creado el problema. Creer en su autonomía personal. Responder siempre con «Devolución», con «Reflejo» sin carga intelectual o emocional. No responder de forma generalizadora, moralizadora, especulativa, tranquilizadora o indagadora.
  4. Ve al núcleo, a lo esencial de la cuestión. No quedarnos en lo circunstancial sino ir al centro, es decir, tener una mirada desprejuiciada.
  5. Lo que hace un diálogo espiritual, constructivo es el Silencio. Lo más interesante de lo que decimos son los silencios que hay entre las palabras. Cuando uno habla de sí mismo lo hace con lentitud porque eso hace que le otro lo acoja. Cuando hay lentitud hay consciencia. Cuando hay lentitud hay creatividad, nos hace estar alegres. Esto es estar despierto, para esto se medita, para darnos cuenta que cada segundo es nuevo, cada segundo es un acontecer inédito. Vivir despacio es un aprendizaje así que aprendamos a hacer despacio al menos una actividad al día.

La conclusión sería que el verdadero diálogo consiste en caminar juntos hacia la verdad.

Pablo D’ors

https://m.youtube.com/watch?v=TG_JGQSf0EQ&t=888s&pp=ygUTRXNjdWNoYXIgcGFibG8gZG9ycw%3D%3D